Cada vez que surge alguien por encima del promedio, surgen dudas, envidias, intereses (políticos, económicos, étnicos, religiosos, ideológicos...). Pero, ¿por qué surge alguien, un@ o más, por encima del promedio de cada generación o época?; ¿Cuándo saber si esa superioridad es natural, es decir, producto de un salto evolutivo, o una divergencia genética, o simplemente una pequeña diferencia conductual o mental; o bien, producto de una alteración genética o metabólica intencional?

En el deporte mundial es muy posible que dada su comercialización y el interés económico-político-ideológico-religioso, se utilicen ciencias y tecnologías no permitidas por el "espíritu deportivo" que se supone, todos los reglamentos del Comité Olímpico Internacional (COI) y Federaciones nacionales e internacionales de las distintas disciplinas deportivas prohíben, pues es una forma no ética de competir y ganar. Pero también es cierto que en muchas ocasiones l@s deportistas, sus entrenador@s o sus gobiernos, han encontrado la forma de evadir dichos reglamentos y salir impunes de cualquier tipo de sanción. Y también es cierto que en la búsqueda de la equidad y/o igualdad en el reconocimiento de derechos, se ha llegado a querer tergiversar la preferencia y diversidad sexual y de género, con respecto a la biología humana.

Y también es cierto que en cada generación o cada época del deporte hay quienes logran sobresalir e imponer marcas que parecían imposibles, sea por avances tecnológicos o bien, por una condición biológica excepcional... o... por una férrea disciplina y esfuerzo físico-mental más toda una condición de seguimiento alimenticio, mental y emocional que impulsen a mejorar día a día en la disciplina deportiva que se especialice. ¿A cuál de los anteriores supuestos podría corresponder la habilidad y fuerza de la argelina Imane Khelif?

Si consideramos que cada década, en promedio, se logra imponer nuevas marcas en las distintas disciplinas deportivas del COI y que todo el trabajo de federaciones y equipos técnicos deportivos, de cada país planean sus actividades precisamente para que sus deportistas impongan nuevas marcas, de acuerdo al lema del COI: "Más alto, más rápido, más fuerte", con el significado de que se llevará los lauros el o la competidor(a) más alt@, más rápid@, más fuerte, en cada una de las disciplinas olímpicas. Y que hay la tendencia banal y de interés político-ideológico y económico, de adjetivar a deportistas, en su especialidad, a ser el(la) mejor de todos los tiempos, se vuelve complicado poder entender el debate que abrieron Imane Khelif y Ángela Carini, en los Juegos Olímpicos de París 2024, sobre problemáticas que creíamos resueltas pero que nos han puesto de nuevo a trabajar en su resolución y consecuencias: equidad de género, ideología de género, el código no binario en materia de identidad y preferencias en la sexualidad, la comunidad LGTTTBIQ, qué es ser mujer, qué es ser hombre...

Aunque haya jóvenes y talentos@s, que demuestran que la velocidad, la altura y la fuerza no solo es cuestión de genética, sino también de trabajo y entrenamiento duro y permanente, debemos a entender la evolución, lo divergente, lo diferente y el esfuerzo disciplinado, como elementos que hacen competir y sobresalir a l@s deportistas.

La evolución biológica es el proceso continuo de transformación de las especies a través de cambios producidos en sucesivas generaciones, y que se ve reflejado en el cambio de las frecuencias alélicas de una población.

Factores que Afectan el Proceso de Evolución
1. Mutaciones.
2. Flujo génetico: transferencia del material genético entre poblaciones.
3. Deriva Genética: cambios aleatorios en la composición genética de una población.
4. Cruzamientos no aleatorios.

Tipos de Evolución

Además debla Macroevolución y la Microevolucion, existen otro tipo de clasificación que tiene en cuenta la distribución de las poblaciones, en cuyo caso se reconocen cuatro tipos de evolución:
• Convergente.
• Divergente.
• Paralela.
• Reticulada

La Evolución Convergente

La evolución convergente ocurre cuando especies poco relacionadas que han evolucionado de manera independiente y proviene de líneas ancestrales distintas desarrollan estructuras similares. Por ejemplo, la capacidad de volar, y por lo tanto estructuras como las alas, se han desarrollado de manera independiente en murciélagos, aves, insectos e incluso animales ya extintos como los pterosauros. A éstas estructuras similares que evolucionaron por convergencia se le denomina estructuras análogas. Cuando la Convergencia no es contemporánea se denomina relevo evolutivo, como en el caso de la ballena y el ictiosaurio.

La Evolución Divergente

Ocurre cuando, a partir de una especie ancestral, se originan una variedad características en los organismos, debido a la mutación y a la selección natural. Las estructuras que provienen de un mismo ancestro común pero presentan diferencias funcionales, se denominan "estructuras homólogas".

La Evolución Paralela

El paralelismo o la evolución paralela ocurre cuando un mismo carácter evolutivo de manera independiente en dos linajes distintos, cuyo estado corresponde a un grupo filogenético cercano, a diferencia de la convergencia, en donde la analogía se presenta entre grupos filogenéticamente lejanos.

La Evolución Reticulada

Corresponde a la formación de una nueva especie, a partir del cruce entre dos linajes distintos. Se debe a la transferencia horizontal de genes y a la especiación hibrida. La transferencia genética horizontal es la transmisión de material genético entre individuos filogenéticamente distintos y su integración en el genoma del receptor. La especiación hibrida o combinación de linajes se da por la reproducción sexual entre individuos de distinta especies, de tal forma que su descendencia porte una combinación de los genomas de sus padres. La documentación de casos de hibridación en la naturaleza es muy limitada, sobre todo en especies animales. Entre los casos mas conocidos se encuentra el _Leopón,_ cruce entre leopardo y macho y una leona, cuyo primer caso se dio naturalmente, y el _grolar_ cruce entre oso grizzly y oso polar, que se da tanto en cautiverio como en estado salvaje.

¿En cuál entra Imane Khelif? En lo personal, creo que en ninguna. Es una singularidad generacional y deportiva del Box. ¿Por qué? Debido a que los roles sexuales se definen como los estereotipos de origen sociocultural sobre el comportamiento esperable en hombres y mujeres de acuerdo con su sexo, y que implican auto-conceptos generales en su valoración del rol.

El rol sexual proporciona información sobre lo que una persona es, debe ser y se espera que sea, por el solo hecho de ser hombre o mujer. El rol sexual ha llegado a ser reconocido como una construcción social, contextualizada e incrustada en la cultura, y susceptible de aprender y desaprender. Su construcción está influida por factores biológicos y socioculturales, y por eso varían de acuerdo con la época y cultura. Evidencia de ello es que en los últimos años los roles sexuales se han modificado; por ejemplo, una persona de 50 años desempeña roles distintos a una de 20 años, aunque se mantienen las creencias estereotipadas en los procesos de socialización. Éste proceso de socialización -primaria y secundaria, y posteriormente diferencial- transmite las normas y valores del contexto familiar, escolar, social y comunicacional, en los que las niñas se identifican con el modelo femenino y los niños con el modelo masculino.

Pero a Imane Khelif se le denominó como hipernadrógina. Por lo que iremos analizando a las personas andróginas, esas que muestran comportamientos que son característicos tanto del patrón de feminidad como del patrón de masculinidad en la sociedad. El comportamiento que elijan depende principalmente de la situación: una persona andrógina se adapta de manera flexible a sus condiciones. Las personas con una puntuación alta de andróginos son sensibles y emocionales, pero al mismo tiempo, también más resistentes al estrés. Como regla general, pueden trabajar bien con representantes de otros géneros psicológicos, porque pueden comprender a cada uno de ellos. También tienen una mejor autoestima y una autoimagen más positiva.

La etimología de andrógino nos lleva primero a la lengua latina y luego a la griega, donde procede de un vocablo compuesto que combina las nociones de «varón» y de «mujer». La primera acepción del término que menciona la Real Academia Española (RAE) en su diccionario, en éste marco, alude al adjetivo hermafrodita: que cuenta con ambos sexos.

La condición de andrógino recibe el nombre de androginia. Ésta cualidad, en el ser humano, se relaciona con evidenciar rasgos exteriores que no coinciden con las características propias del sexo de uno. Un hombre que tiene pelo largo, se depila las cejas y pinta sus labios puede ser calificado como andrógino, ya que su apariencia física se asocia a una mujer y no a la estética masculina.

Platón fue quien utilizó ésta idea por primera vez en «El Banquete», mencionando a seres que contaban con dos sexos en su cuerpo. Mediante un rayo, Zeus escindió esos sexos y, de ésta manera, los andróginos «perdieron» su otra mitad. A partir de éste concepto se desarrolló la postura que sostiene que las personas se encuentran a la búsqueda de esa otra mitad al tratar de formar pareja.

L@s andróginos resultan muy llamativ@s pues son personas que pueden lucir ropa destinada a los dos sexos. Y es que se trata de individuos que, a simple vista, resulta difícil determinar si son hombres o mujeres. En dicha dualidad radica su popularidad en la industria de la moda. Hay que tener en cuenta, de todos modos, que los sujetos andróginos suelen ser discriminados porque no cumplen con los estereotipos del hombre y la mujer. Pero a pesar de dicha discriminación, que en los peores casos puede llegar a límites de suma violencia, no todo es negativo para las personas andróginas: las más afortunadas cobran fortunas por sus trabajos en las pasarelas y deslumbran a los lectores de revistas de moda con sus aspectos de sexo indescifrable.

Si bien "el machismo" nos lleva a pensar en ese mundo ficticio compuesto exclusivamente por seres heterosexuales, los cuales se agrupan obligatoriamente en parejas y dedican su vida a la procreación: el hombre es rudo y sale a buscar el dinero para comprar alimento; la mujer es frágil, y por esa razón espera a su caballero en la casa, mientras limpia y cocina para él y su descendencia. Por lo que nacer con aspecto indefinido no es precisamente una bendición frente a quienes arrastran esas ideas arcaicas, pero por lo visto hay una luz de esperanza que los puede ubicar fuera del alcance de los garrotes.

Es importante señalar que no debemos confundir los términos _andrógino y andrógeno:_ éste último sirve para hacer referencia a la hormona que promueve el surgimiento de los caracteres sexuales secundarios del hombre. Como suele ocurrir en éstos casos, existen muchos textos en los medios de comunicación en los cuales se usan de forma incorrecta, como si ambos significasen «rasgos externos que no responden claramente al sexo de la persona». Por lo que si nos remitimos a la etimología de ambas palabras, vemos que andrógino está formado por las voces griegas correspondientes a «varón» y «mujer» (andrós y giné, respectivamente), mientras que andrógeno combina «varón» con el sufijo -geno, que indica «que produce o genera».

El caso de Imane Khelif, en términos biológicos es que produce más _testosterona,_ la hormona que se elabora principalmente en los testículos (una parte del sistema reproductivo masculino) y es necesaria para desarrollar y mantener las características sexuales masculinas, como el vello facial, la voz profunda y el "crecimiento muscular"; mientras que la _progesterona_ es la hormona producida principalmente en los ovarios, dos glándulas del sistema reproductivo de la mujer que contienen los óvulos. Cada mes, la progesterona prepara el útero para el embarazo... Y los estrógenos son un grupo de hormonas que juegan un papel clave en la salud reproductiva femenina, incluyendo la pubertad, menstruación, embarazo y menopausia. Los estrógenos también son importantes para la salud del corazón, los huesos y el cerebro tanto en hombres como mujeres.

Así pues, ¿qué pasa si una mujer presenta altos niveles de testosterona? Crecimiento de vello en exceso (vello oscuro y grueso en la zona del bigote, la barba, las patillas, el pecho, las nalgas y la parte interna de los muslos), aumento del tamaño del clítoris, ausencia o irregularidad en los periodos menstruales. Incluso puede presentar calvicie de patrón masculino o adelgazamiento del folículo capilar, acné y cambios en el contorno corporal femenino, por ejemplo, disminución del tamaño de las mamas... Ausencia de periodos menstruales (amenorrea), piel grasosa; y también se pueden presentar el aumento del tamaño del clítoris, el ngrosamiento de la voz, e, _incremento en la masa muscular._

La argelina Imane Khelif nació mujer, tiene aparato reproductor femenino y hasta donde se sabe, es heterosexual, le gustan los hombres, pero produce altos niveles de testoterona, la determinante hormona de la masculinidad, de allí su aspecto físico y su masa muscular. ¿Ello le da una ventaja ante sus congéneres que no producen los mismos niveles que Imane Khelif? Sí, sin duda. Pero igual ventaja tenía Newton o Einstein sobre sus contemporáneos y no les negaron el acceso a la universidad. Cosa contraria a Srinivasa Ramanujan, el hindú que por no ser anglosajón y cristiano de nacimiento, vivió una tortura para ingresar a la universidad.

El problema de Imane Khelif ¿es en realidad un asunto biológico como dicen los de la IBA, Giorgia Meloni, la Primer Ministra de Italia y todo el pensamiento conservador europeo? O bien, ¿es cultural pues es de piel oscura, musulmana y rompe los parámetros estéticos greco-latinos y con ello desafía a la hegemonía cultural anglosajona y cristiana del mundo occidental?

Deportivamente, ¿Se deben abrir más categorías de género en el COI, para garantizar la inclusión o como ya existe con las personas de capacidades diferentes y las estaciones del año, abrir la versión del COI para la comunidad LGTTTBIQ y para l@s andrógin@s?

Es un asunto que suma a nuestra diversidad como especie humana.