Costa Rica

Guillermo Farber

Guillermo Farber | diarioalmomento.com

Buhedera

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Guillermo Farber

Costa Rica
Diciembre 19, 2014 03:31 hrs.
Política Nacional › México Ciudad de México
Guillermo Farber › diarioalmomento.com

Estoy verdaderamente maravillado por este artículo “How a Tiny Central American Contry is Getting Richer and Saving the Environment (http://www.bibliotecapleyades.net/ciencia/ciencia_futurebeyond78.htm) Reproduzco algunas frases clave. “La sabiduría convencional nos dice que el crecimiento económico y una sólida política ecológica no pueden ocurrir simultáneamente. Pero lo único que tenemos que hacer para comprobar que esa compatibilidad puede darse en la realidad, es mirar un poco hacia el sur para encontrar un modelo que satisface ambos objetivos. ¿Qué diríamos de un país en el cual el 99.2% de la energía que consume es renovable, ha mantenido un PIB creciente durante décadas, eliminó por completo su aparato militar hace 6 décadas, y ha pasado de ser una de las regiones más deforestadas del hemisferio occidental a convertirse en un país con la mitad de su territorio cubierto de bosques? Bueno, ese extraño país existe. Se llama Costa Rica.”



PARÁMETROS

El país es de escala humana: 5 millones de habitantes (como el estado de Nuevo León) en 51 mil kilómetros cuadrados de extensión (un poco menos que el estado de Sinaloa), con una densidad demográfica de 98 habitantes por kilómetro cuadrado (como la del estado de Jalisco).



PAX NATURA

“Paz con la Naturaleza”. Así llamó su presidente Óscar Arias Sánchez en 2007, en su segundo turno en el cargo (1986-1990 y 2006-2010, abogado, economista, político, politólogo, empresario, Premio Nobel de la Paz con más de 50 doctorados honoris causa, 6 libros publicados, nacido en 1940, sobreviviente del virus de influenza AH1N1), a la política institucional de su país a favor de un medio ambiente sustentable y democrático. “Ese nombre designa la base ideológica que debe servir como base ética para un compromiso nacional con el medio ambiente: una combinación de ética rigurosa, sólido ambientalismo científico, y políticas públicas efectivas.” Algunos analistas consideran como punto clave de inflexión la decisión de eliminar la existencia de un ejército nacional en 1948, lo que permitió canalizar esos recursos hacia proyectos de corte social y ambiental. “Tras 66 años sin gasto militar, esa decisión poco convencional ha demostrado ser tanto valiente como visionaria pues permite destinar una parte importante de la inversión pública hacia programas de índole social y ambiental.”



LA PERFECCIÓN NO EXISTE

En el enredado ámbito de los entornos colectivos las cosas nunca son tan simples ni tan claras (hay muchos puntos discutibles en esta política, así como señalamientos críticos aparentemente bien fundados), pero la cosa va esencialmente por ahí. El caso es que Costa Rica ocupa un lugar destacado en sus números tanto de prosperidad económica como de calidad de vida de su población (bajo desempleo, una cuarta parte de la superficie del país bajo protección ecológica, el derecho constitucional de cada residente en el país a vivir en un medio ambiente sano y ecológicamente balanceado, etc). Quizá este modelo sea excepcional y sólo posible, por ahora y en las circunstancia mundiales de hoy, en un país limitado en extensión y demografía, habitado por una población altamente educada, y bendecido con una geografía envidiable. ¿Pero no se nos advierte que la posmodernidad económica apunta a una diferente mezcla de actividades primarias (agropecuarias, minería), secundarias (industria) y terciarias (servicios como el turismo)? Ante el desolador ejemplo chino de crecimiento económico a cualquier costo, incluyendo los ambientales, Costa Rica es una bocanada de brisa limpia. Claro, los 1,300 millones de chinos son unos cuantos más que los 5 millones de ticos (260 veces más), pero de todos modos el contraste es notable.



¿MIGRAR?

Ya tenía yo referencias más que sugerentes de Costa Rica. Ahí se mudó a vivir hace unos años mi principal fuente conspiracionista: un gringo inteligentísimo (PhD en estadística), temerario y claridoso que me envía cada mes, por suscripción, un par de gordos newsletters de geomacrofinanzas a cual más asombroso y esclarecedor. Entre otras cosas, dice que en 8 años no ha visto jamás un chemtrail sobre esos aires; yo últimamente he dejado de ver esas estelas venenosas en el cielo de esta Corruptitlán de mis Pecados, pero los he visto muchas veces antes, y en todo caso la sopa purulenta que es el aire de esta ciudad ya es de por sí suficientemente tóxica. En resumen, Costa Rica no parece ser un mal refugio en la Gran Tribulación global que se avecina.

OOOOOOMMMMMM
Recuerda meditar cuanto puedas, cuando puedas.



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