Ella tomó su bolso. Allí tenía guardado el comprobante de la guardería. Su niña apenas tiene tres años de edad. No la puede llevar consigo al trabajo. Despachar hamburguesas es su vida de nueve a cinco. A Rosita la cuidaban de nueve a seis. Apenas para llevarla, terminar el trabajo y volver con ella a casa. Éste, sin embargo, será su último día. La guardería será cerrada. El gobierno ha cancelado el subsidio.
--- ’Que la cuiden sus abuelitos’, recordó que escuchó a alguien del gobierno federal decir.
--- ¿Cuáles abuelitos? Ella es madre soltera. Su marido murió baleado. Sus padres están desplazados. ¿Cuáles abuelitos?
Sucedió en Badiraguato, Sinaloa:
--- ’Somos de estancias infantiles queremos que nos escuche’, dijo una mujer, a lo que el presidente respondió: ’ya, ya dije, ya hablé hijita’, y siguió su camino entre la multitud.
La mujer insistió: ’queremos respuestas, eso no nos responde nada. Señor por favor, escúchenos somos mujeres, se aprovecha del género, escúchenos por favor’, pero no tuvo respuesta del mandatario.
’Ya, ya dije, ya hablé, hijita’. ¿Qué denota, que connota la frase del presidente?
En lo que va de su periodo, el de López Obrador se ha distinguido por una cosa: es el gobierno de un solo hombre. Él habla. Él dice. Él decide. No hay otro. Quien ose contradecirlo le pasará lo que al comisionado regulador de la energía, Guillermo Ignacio García Alcocer. Le ha caído todo el peso del Estado. Le investigarán hasta hallarle algún conflicto de interés. Por hablantín.
¿En qué se parecen los casos de las guarderías con el del comisionado? ¿En qué con lo del olvidado huachicol? ¿En qué con los abusos del Grupo Modelo? ¿En qué con los fifís despedidos de sus empleos? ¿En qué del asunto de la Comisión Federal de Electricidad? Todo se parece. Es una imagen guardada en el colectivo de los mexicanos: corrupción.
No importa sea demostrada o no. En ésta esquina el enemigo número uno de los mexicanos, los corruptos. En la otra, del lado de los buenos, el héroe que exterminará a esa hidra de las mil cabezas. Cual Hércules. Cual Jesucristo liberando ladrones y convirtiendo piedras en pan o agua en vino. La purificación llegará de la mano de Él.
Se trata de una imagen bien manejada en discursos, textos, medios. Es propaganda, pues.
¿Cómo es esto? ¿Por qué y cómo en una determinada sociedad algo, una imagen, un conjunto de palabras, un gesto, un objeto, un comportamiento, significa algo?
Benito Mussolini inventó el método de la propaganda para dominar y establecer el fascismo como doctrina. El Estado, encarnado en una sola persona, es lo máximo. No hay individualismos. Lo que se oponga al Estado es el enemigo, el mal, el corrupto. Lo que esté dentro, ha sido purificado. Adentro todo tienes. Afuere eres nadie.
Los estudiosos de los fenómenos de la comunicación sostienen que existe una rama llamada semiología o semiótica, que es la ciencia derivada de la filosofía que trata de los sistemas de comunicación dentro de las sociedades humanas, estudiando las propiedades generales de los sistemas de signos, como base para la comprensión de toda actividad humana. Aquí, se entiende por signo un objeto o evento presente que está en lugar de otro objeto o evento ausente, en virtud de un cierto código.
El código manejado a la perfección es la corrupción. ¿Quién, en su sano juicio, acepta la corrupción como forma de vida? Por ello habrá que combatirla y ganar elevados índices de aceptación popular.
Por ejemplo, aún se recuerda la fachada del partido del fascismo de Mussolini en Italia: un enorme cartel plagado de la palabra sí, a lo largo y ancho del edificio de diez pisos, era perfecto ribete de la fea cara de Benito. Sí, a todo lo que dijese el dueño del estado italiano. Ningún otro.
El fenómeno de la semiosis es la instancia donde algo significa algo para alguien y es por lo tanto portador de sentido. Por ello es que, el discurso de nuestro presidente lo muestra como un experto semiólogo. Sabe a la perfección el significado y significante de su cruzada en contra de la corrupción. Tendrá miles de seguidores que le darán su irracional respaldo. Aunque, en la realidad, tan sólo aparezcan ladrones liberados, perdonados, purificados. Tal cual lo hizo Jesucristo. Todos perdonados. Ninguno ha conocido los laberintos de Dante.
La semiótica distingue entre la denotación y la connotación; entre claves o códigos y los mensajes que transmiten, así como entre lo paradigmático y lo sintagmático. Estas dimensiones dan origen a disciplinas homónimas que rigen las relaciones entre signo y cosa designada: la semántica; relaciones entre signos: la sintáctica; y entre signos y sus condiciones de uso: la pragmática.
Nuestro presidente es semiólogo, semántico, sintáctico y pragmático. ¿Lo dudan?
TRASCENDIÓ
QUE un regidor, Javier Morlet Macho, logró liberar un acceso a la playa en la zona Diamante. Le aplaudieron lugareños y casi todos los acapulqueños que hemos sido testigos de có